DIARIO DE UN VIAJE MORTUORIO
- culturomaniaalb
- 30 oct 2020
- 4 Min. de lectura

2 de julio
El día de hoy he muerto, es algo difícil saber que no podré estar físicamente cerca de mis familiares y seres queridos, es bastante duro verlos tristes y no poder hacer nada al respecto para poder decirles que estoy bien en donde me encuentro en este momento. Aunque de ahora en adelante tendré que acostumbrarme a estar lejos de toda mi familia y dejarlos seguir con su vida.
5 de septiembre
Han pasado algunos meses desde mi partida y afortunadamente todos en mi familia se ven mucho más felices ya que han recobrado la sonrisa que tanto los caracteriza; es divertido poder ver como mi pequeña nieta aprende a caminar y cuando se cae se levanta rápidamente para intentarlo de nuevo y como mi otro nieto ya ha crecido tanto que ahora va a la secundaria.
Hasta este momento he vuelto a escribir en este diario, ya que pienso que es una buena idea ir registrando como van pasando algunas cosas, tales como mi viaje al mundo de los vivos cuando me pongan mi ofrenda.
Ay, tengo mucha fe en mis hijos que se acuerden de hacerlo y recuerden los tiempos en los que entre todos poníamos la ofrenda para sus abuelitos y tíos ya fallecidos.
7 de octubre
Por lo que he visto todo transcurre con naturalidad en mi familia, solo que he escuchado entre mis nietas más grandes que me pondrán una ofrenda, ¡Estoy sumamente emocionada!, cada día está más cerca el día en el que voy a poder regresar con mi amada familia, quizás no me puedan ver, pero en esta ocasión sabrán que estoy con ellos, además de que podré disfrutar de toda la comida que hagan para mí.
29 de octubre
Cada día crece más la emoción que siento, estoy tan feliz de que al fin podré estar con toda mi familia, además de que es genial poder ver como entre algunos de mis nietos y nietas han ido a comprar fruta, flores de cempaxúchitl y todo lo necesario para hacer la comida para la ofrenda; es bonito ver como entre mis nietos más pequeños se han puesto a hacer papel picado para darle colorido al lugar.
Gracias a esto toda la familia se ha reunido y es bueno ver que se la pasan riendo, sobre todo porque mi pequeña nieta se la pasa sorprendiéndose de todo lo que ve y descubre a cada momento.
30 de octubre
Estoy mas que feliz, el día de hoy me encontré con mis papás y mis hermanos ya fallecidos, fue tan bonito volver a estar con ellos después de tanto tiempo separados; como siempre mis hijos e hijas ponen la foto de todos ellos en la ofrenda nos hemos organizado para ir juntos al mundo de los vivos, además de que así no nos perdemos, porque, así como somos seguro nos vamos a perder y va a ser un desastre para volver a encontrarnos.
31 de octubre
Mis hijos crecieron con la costumbre de que durante la noche de hoy, como en la de mañana se disfrazaban de catrinas y catrines y salían a pedir “calaverita”; estoy tan orgullosa de ellos, ya que es bonito ver como esta tradición la siguieron inculcando entre todos sus hijos y lo logro percibir desde donde estoy porque absolutamente todos los nietos se han disfrazado, desde la nieta más pequeña hasta mi querida nieta que ya está en el último año de preparatoria.
Mientras escribo todo esto me ha inundado una nostalgia enorme, ya que desde mi partida he visto como todos han crecido tanto y se han convertido en las buenas personas que siempre desee que fueran; mis pequeños nietos aún tienen un largo camino que recorrer por la vida, pero me siento tan orgullosa de ellos. Ay, como hubiera querido haber seguido en sus vidas, viendo como cumplían todos sus objetivos y animándolos a seguir adelante, si tan solo pudiera decirles todo esto en lugar de solo estar observando cómo están preparando las cosas para poner la ofrenda.
Siento que escribo este diario con la ilusión de que cuando a ellos les toque partir y nos reunamos de nuevo, les pueda enseñar esto y vean parte de lo que he hecho en parte de todo este tiempo que hemos estado separados.
Por otra parte es una forma de saciar mis ganas de escribir, igual toda mi familia sabe que en vida fue una de las cosas que más amé hacer y ni modo que estando muerta deje ese sano vicio a un lado.
1 de noviembre
Al fin se ha llegado este esperado día, mi familia ha dejado lista la ofrenda para que podamos ir a pasar un momento con ellos y aprovechemos este día del año en el que podemos estar juntos.
Estoy tan feliz, emocionada, ¡Simplemente no sé cómo expresar lo que siento!, es como si mi corazón estuviera rebosante de alegría y a la vez de nostalgia de estar con ellos, aunque sea una vez al año.
La ofrenda que nos han puesto es simplemente hermosa, con su precioso camino de flores de cempaxúchitl para que no nos lleguemos a perder, las velas que iluminan nuestro camino; además, desde aquí puedo ver como prepararon ese delicioso mole rojo que a todos nos encanta, el chocolate calientito, el dulce de calabaza que tanto nos gusta, el pan de muerto y los otros patillos que ya saben que tanto nos encantaban cuando estábamos vivos.
Creo que es momento de dejar de escribir, antes de que mis papás y hermanos se vayan si mí.
2 de noviembre
Todo este viaje ha sido sumamente impresionante, fue tan bonito ser bienvenida en la casa de mis hijos, con ese aroma a copal y a flores que tanto me ha gustado.
Fue la primera vez que ido a través de este viaje mortuorio al mundo de los vivos y fue sumamente bonito poder convivir, aunque fuera solo este día con toda mi familia.
Quisiera decirles lo orgullosa y feliz que me siento de todos ellos, ya que simplemente una mejor familia no pude haber tenido; espero que cuando les llegue el momento de partir y nos reunamos de nuevo pueda compartirles todo esto que ahora escribo para ellos.
Por el momento soy tan feliz de que mis hijos y nietos sigan recordando esta hermosa tradición y sigan recordando a sus familiares a fallecidos.
Mientras tanto, seguiré escribiendo lo que siga experimentando y esperaré con gusto y felicidad para ir a verlos el próximo año.

Emotivo, conmvedor e interesante lo que cuenta la entrada. ¡Me encantó!.
Me ha entrado mucho sentimiento. ¡Qué bonito!
Que buena idea contarlo así.
Justamente por imaginar esto, es porque preservamos esta bellísima tradición. ¡Qué nostalgia!